y que te gustes
-como mi hija cuando se levanta por la mañana, se mira en el espejo y se sonríe-
Ser quién eres…
y que seas lo que pareces.
Ser quién eres…
y que te guste contarte cuentos.
Ser quién eres…
y que tus emociones tengan coLores.
Ser quién eres…
y que disfrutes cada segundo de tu país de las maraviLLas.
Ser quién eres…
y que sepas voLar en sueños cuando tu día te ponga los pies en el suelo.
Ser quién eres…
y disfrazarte de mariposa, de jirafa o de campo de amapoLas.
Ser quién eres…
y que seas luz, a la que no le importa el día o la noche.
Ser quién eres…
y que seas contagioso en risas.
Ser quién eres…
y que la filosofía de vida la defiendas a capa sin espada.
Ser quién eres…
y que te lo pases bien siéndolo,
que tu velero bergantín vaya con viento en popa y a toda vela.
Ser quién eres…
y que tu niño interior estudie exteriorismo.
Ser quién eres… y que eso no sea una cuestión*.
*“Ser o no ser, esa es la cuestión”, es la primera frase del discurso pronunciado por el príncipe Hamlet en la afamada obra de William Shakespeare, ‘Hamlet’. Todo un clásico de la literatura universal que plantea una profunda disyuntiva entre existir o no existir, vivir o morir, estar o no estar.