de convertirse en pLan «a»,
de no dejarse para luego,
de dar ventaja a quién quiere quererte, y no al que te trata como opción,
tiempo de encontrar la moraleja a la lección,
de aplicarse el cuento,
tiempo de «bastas ya» y de «hasta aquí hemos llegado»,
tiempo de tener tiempo para los que te miren con brillo en los ojos… y no para los que te lo presten,
tiempo para no frenarse a ningún beso…
tiempo de dejarse llevar por la corriente…
hasta encontrar el rincón exacto donde el pLacer encuentra su sitio.
Fotografía: Donde las eLes encuentran su nombre. Copyright ©.