suspira, hazte un resumen emocional,
navega entre abrazos…. (porque éstos siempre tienen razón),
aprende a estar… sin dejar de ser,
aguanta la respiración durante un segundo… pero sólo para poder hiperventilar placer en cada emoción construida a tu medida,
hazte spoiler, cuéntate un final feliz,
¡entérate de una vez de que por dentro eres jardín, no desierto!
convierte tu bueno en lo mejor
y tu mejor…
en inmejorable.
Si no te ilumina ni te construye, suelta…
Si permanece pero no crece, suelta…
Si te procura seguridad y así te evita el esfuerzo de desarrollarte, suelta…
Si no brinda reconocimiento a tus talentos, suelta…
Si no acaricia tu ser, suelta…
Si no impulsa tu despliegue, suelta…
Si dice pero no hace, suelta…
Si no hay lugar en su vida para tí, suelta…
Si intenta cambiarte, suelta…
Si se impone el “yo”, suelta…
Si son más los desencuentros que los encuentros, suelta…
Si simplemente no suma a tu vida, suelta…
¡Suéltate!… la caída será mucho menos dolorosa que el dolor de mantenerte aferrada a lo que no es.
Autor Anónimo